MARCO ZAMUDIO
En retrospectiva
- ARTE
- diciembre 2024
- Rosaura Cervantes
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Xochiquetzal, Venus y Afrodita: Del maíz a la pasión es la nueva exposición del Maestro Marco Zamudio, la cual estará hasta el 14 de marzo de 2025 en la Casa de Cultura de la Universidad Autónoma del Estado de México en Tlalpan, la cual reúne 60 obras de las cuales 50 son de su colección privada.
Han pasado cinco años de la última vez que coincidimos para una entrevista, más la amistad con el maestro Zamudio ha continuado y en esta ocasión retomamos varios temas profundos sobre la vida y la muerte, de la mujer y del crecimiento de él como artista.
Marco, esta exposición es una recopilación de más de tres décadas de trabajo, vemos desde tus primeras obras hasta las actuales. Hay un dejo de nostalgia en tu mirada, ¿cómo lo vives? ¿qué te dice cada trabajo? ¿a dónde te lleva cada uno?
Con voz clara y llena satisfacción, responde: “Siento que me abrazan los cuadros. Los cuadros me arropan y me vienen varios recuerdos, ya tengo 51, recuerda que empecé a los 16 años, momento en que conozco al maestro Jorge Albarrán… Profesionalmente fue hace 35 años -y en marzo cumpliré los 36-, entonces no podía mantenerme ni yo con mi obra, y ahora mantengo a mi familia. Cuando inicié, con mis primeros pagos le echaba la mano a mi mamá, ahora lo hago con mi papá… Puedo decir que vivo de la pintura, son reflexiones que voy planteando cuando veo mis pinturas.
Nos detenemos frente a uno de sus primeros cuadros, es una pintura con tres bellas mujeres cubiertas de la cabeza, se trata de las Tres Gracias y una fruta que vuela, óleo sobre lienzo que data del 2003-2004… Pasamos de una historia a otra de sus obras. Y de pronto recuerda el de La última cena, hace memoria sobre quien fue su primer propietario y cómo pasó por tres dueños más antes de regresar de nuevo a sus manos y con un aumento significativo de su precio inicial. «Cuando regresó a mis manos lo restauré porque el último dueño la había descuidado».
Regresamos con las Tres Gracias y una fruta que vuela. Marco tenerte frente a una de tus primeras obras resulta especial… “¡Sí! Una obra que ha participado en un montón de exposiciones en Asia, Europa, América (Estados Unidos). La primera vez se vendió por $35,000.00 pesos, la compré hace 7 años por $450,000.00, y hoy vale millón y medio.
¡Creció tu hija! Qué bonito que hoy lo puedas decir.
De joven yo decía, ¡Quiero vivir de la pintura! Y no podía, y pese a ello, nunca dejé de pintar. Paulatinamente iba vendiendo más cuadros. Los cuadros de desnudos son los más costosos.
“Personae la publicó cuando la expuse por primera vez en la Secretaría de Comercio Industrial -allá en Reforma-, y después en la galería ArtDicré de Josecito del Bosque que me apoyó por primera vez para entrar a su galería privada y quien hoy está desaparecido del medio… la gente cambia”.
Continúa: “El maestro Jorge Albarrán marcó mi vida de estudiante cecehachero (preparatoria) él me dijo: «A veces se necesitan dos cosas para el vivir de la pintura, algo así como huevos cabrón. ¡Tienes todo el poder para vivir de la pintura! ¡Tienes talento!». Y eso me inyectó más ánimo y ahora estoy aquí. Siento que no me equivoqué”.
Abordamos el tema sobre las trabas que ponen los galeristas en México, caso contrario a lo que ocurre en Estados Unidos, Alemania, Italia, etcétera. Hoy nos comparte cómo se concibe esta exhibición: “Hace poco conocí a David Alejandro Teapila Valencia, director de esta Casa de la Cultura de la Universidad del Estado de México. Me dijo que le encantaba mi obra, mi trayectoria; lo conocí por un amigo en común y me empezó a decir:
«–¿Por qué no hacemos una experiencia de tres mujeres, tus afroditas y vamos a aumentarle algo más…?
–¿Como a Medusa?…
–Una combinación entre Medusa y Xochiquetzal.
–¿Quién es Xochiquetzal?
–Busca…»
Xochiquetzal es la dadora de vida, pero también es la quitadora de vida. Entonces, ¿también castiga? Es castigadora, como toda mujer. (Hace una pausa, ríe y continúa) Por eso sigo pintando a la mujer porque es imposible. Creo que la definición más importante sobre una mujer es un signo de interrogación. (Ve mi cara de incredulidad y responde) De verdad, aunque es imposible vivir sin ellas (esboza una gran sonrisa).
Sobre el tema profundiza: “Yo lo veo ahorita que mi mamá falleció. Falleció mi suegra. Ahora veo que las riendas de la familia ahora pasaron a mi hermana y a mi esposa. O sea, ¿por qué digo esto? Porque en sus casas llegan mis hermanos, los primos, los tíos. El papel de la mujer en la sociedad es de integración. La mujer es el núcleo.
Así se percibe en tus obras. Podemos ver pinturas como Xochiquetzal-Meduza (óleo sobre lienzo sobre tabla), Mother and son (óleo sobre lienzo sobre tabla), las Ninfas Efeba, Ninfa arreglándose el cabello, Ninfa Magdalena red (colores al gesso sobre tabla), incluso, una de mis favoritas “Luz de Afrodita” (óleo sobre lienzo) todas se ven empoderadas, seguras, le das un valor a la mujer sobre la que muchas veces ni nosotras mismas lo hacemos. En ocasiones percibo una invitación de vernos de manera distinta, una especie de «lo que veo, es lo que yo necesito ver en mí»: Es lo que platicábamos hace rato, es el auto-saberte, auto-conocerte. Después continuamos con el tema de la crianza desde las madres castradoras hasta las que otorgan toda la libertad, esos extremos que también dañan y también aquellas historias personales.
Llegamos a las manifestaciones feministas, “un monumento, una escultura no es más importante que la vida de un hijo desaparecido, pero siento que hay que conservar esa parte de la historia, yo que es importante conservar la memoria, a veces es lo único que tiene el ser humano, o sea, las creaciones. No es justo que una mujer por muy enojada que este, destruya esa memoria porque se está destruyendo a sí misma. Entonces, creo que ciertas feministas se hacen daño a sí mismas. Creo que es más preponderante su situación, cuando la voz llega el diálogo y la voz que grita y la voz que dice muchas cosas, llega más a las personas que una destrucción. Yo siento que su existencia viene de una provocación del hombre… Cuando las mujeres deciden alzar la voz, cuando la mujer toma su derecho al voto, ejerce su derecho, es muy violento para el hombre. Cuestiona: ¿Crees que han ganado terreno las mujeres? Tú ¿qué piensas? Y esto nos lleva a otro tema, que es nuestra misión como seres humanos: “Yo siento que venimos a ser felices. Hablando de la felicidad, insisto, ahora yo vivo de mi pintura y reflexiono, casi nunca agradecemos a los coleccionistas por adquirir nuestras obras, hoy yo quiero hacerlo, pienso en Ricardo, en Heriberto, en Javier, José, en José Luis -no menciono sus apellidos- más sí les doy las gracias porque siempre están esperando a ver qué hay de nuevo, porque ellos tienen la posibilidad de comprar la obra y sabes, no solo se trata de adquirir mí obra, es seguir creyendo en mí y lo valoro porque esta carrera la he hecho con ellos y gracias a ellos”.
“Así como ha habido galeristas que se han pasado de listos, también hay quienes te presentan con los coleccionistas y es una sinergia que ha sido importante en mi carrera. Después de la pandemia, las redes me han funcionado muy bien para exhibir y mover mi obra”.
Durante el recorrido por la galería de la Casa de Cultura de la Universidad Autónoma del Estado de México en Tlalpan, llegamos a los Cráneos, que desde siempre su propuesta me han impactado. Estos últimos años se ha manifestado esta dualidad, tanto la vida como la muerte en tu vida, ¿qué tanto cambió o confirmó tu percepción de estas? Siempre le he tenido mucho respeto a la muerte, creo que ahora le tengo más porque se llevó a mi mamá, que era lo mejor del mundo para mí, pero ahora que ya no está, le tengo muchísimo respeto. Hace tres se llevó a mi mamá, hace dos a mi suegra y este año llegó Lorenzo.
Desde que te conocí, te habías declarado ateo, sin embargo, pintas varias escenas y personajes que se mencionan en la Biblia, y provocas que cuestiones tu postura, pero la vida a veces te cambia el escenario… ¿Sigues con la misma postura?
Yo me decía ateo, pero hoy estoy muy confundido. Es la primera vez que lo digo en una entrevista. Esta confusión, viene a partir de la muerte de mi mamá y a todo lo que me he enfrentado en estos 3 años: cuando más he necesitado un comentario de mí mamá, algo pasa, viene un pensamiento con ella, me acuerdo de sus palabras y salgo de ese estado.
Aunque sabes, el personaje de Jesús que siempre me ha gustado. Jesús, ¿cómo sabía todo lo que tenía que hacer? O sea, o sea, más allá del mito, sí se sabe que había un hombre que era un revoltoso, pero un tipo que hablaba con todo mundo. Hay escritos de que los egipcios conocían a Jesús. ¿Cuándo? ¿Cómo? ¿Por qué?
Vienes de una formación académica y familiar en que todo se cuestionaba y todo tenía que ser tangible, pero la sensibilidad, la inspiración que tienes, es algo intangible, aunque posterior lo plasmes en el lienzo o en las maderas… (risas). Después de pensar en la vida y la muerte, tenemos delante nuestro a ‘La vecina’, mixta sobre lienzo sobre placa de acrilato, 336x147cm, 2016~2022, una colaboración con el maestro Rafael Cauduro y no deja pasar la ocasión para recordar cuánta emoción le causó este trabajo en conjunto: «Si te fijas, todo lo hacía con faltas de ortografía a propósito».
Las puertas, ¿qué te dicen?
Aspectos te llevan al otro lado. Y podemos pasar de una parte a otra y a otra. Yo digo que así es la vida y así es la muerte también, nos llevan a otras partes…
Añade que mucho de los trabajos que se realizan, tienen que ver con las experiencias vividas, “no puedes romper un cuadro porque deja de ser la persona y es el personaje, pero indudablemente el personaje te recuerda a la persona, y se conserva la esencia de la persona con cada pincelada… Dijiste hace algo importante el renacer, volvemos a tener otras concepciones, otras vistas, otros horizontes…”.
Antes de despedirnos, platícanos sobre tu único paisaje…
Es del 2016, esto fue lo que vi en Oaxaca, una tormenta se avecinaba, el sol estaba ahí eran como las 4 de la tarde. Aquí hay mucho claroscuro. Es un homenaje al Greco, se me figura a “la vista de Toledo”.
Xochiquétzal, Venus y Afrodita, del maíz a la pasión, está dedicada a Merisi, Luca, Lizeth, Lian, Leo, Lorenzo, a Deivid, a Don Arthur, a mis cuñados y por supuesto a Roscacha y a Magde.
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