VIVE LA EXPERIENCIA KYU

Vivir la experiencia KYU es sentirse en casa. La bienvenida es cálida y las instalaciones maravillosas, con esa increíble pared llena de leños y la espectacular “Dama KYU” creada por 2 ALAS (Andrew Antonaccio) al fondo.

Nos recibe Gabriel Sánchez, el gerente, quien nos da un pequeño tour para tomar algunas fotografías de la terraza con vista a la avenida Presidente Masaryk, con su techo movible que da unos contraluces muy lindos para las fotos, además de la hermosa barra.

En esta ocasión, también pudimos platicar con el Chef Juan Cortés, quien compartió parte de los platillos estrella, razón por la cual le pedimos una degustación sorpresa, y así iniciamos la tarde con uno de los platillos con la firma de la casa, la Coliflor rostizada, que si bien en redes sociales luce espectacular, su sabor va más allá, esa mezcla con el queso cabra va creciendo sin opacar a la coliflor y se combina magistralmente con la vinagreta de hierbas y shishito, fue mucho más perfecta de lo que yo esperaba.

Una recomendación que nos hace el Chef Juan Cortés (@chefjuancortes) es que todos los ingredientes se degusten en el mismo bocado, y con el Mero rostizado, por supuesto que así lo hicimos, y le añadimos los frijoles blancos estofados en sake con puré de cilantro, la combinación resultó interesante al paladar, para continuar con un Pollo frito estilo coreano, sumamente crujiente, lleno de sabor y lo complementamos con espinacas salteadas.

Y de la comida coreana llegamos al estilo Thai con el Arroz frito, el cual es cocinado en un bowl de piedra. Hugo Castañeda, nuestro mesero, nos hace el favor de revolverlo con sumo cuidado para integrar el huevo con el jengibre con el resto de los ingredientes, incluyendo el secreto de la casa. Ahora sí cerremos la tarde con una joya, con una Panna Cotta de Lima Kaffir, hoja de kaffir, crumble de avena, sorbete de fresa y albahaca, ¡deliciosa!

La coctelería hay muchas bebidas muy interesantes, y si buscan sin alcohol, está el Tónico Tailandés que lleva té de limón, flor de sauco y lima kaffir o el “Deja ir a ese hombre”, con mango, chile coreano y jugo de limón, en esta ocasión solo optamos por una bebida de frutos rojos.

La música está al volumen adecuado para poder charlar con los amigos, socios o familia, el servicio es muy bueno, y todos comandados por el capitán Fernando Góngora. Tienen tarjetas de regalo y platillos de temporada. Seguramente regresaremos pronto a probar el pastel de Coco, sugerencia de Alfonso Garza, Galo PR.