Revista Personae

PAULINA CARRETERO

Entre formas y colores

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«Cuando veas este cuadro piensa que tiene hasta mi ADN, porque algún cabello se puede quedar pegado en la pintura, y piensa que esta obra fue pintada para ti, pensando en todo lo que eres… Imagíname dando cada pincelada a partir de un lienzo en blanco que tiene una historia y la historia se cuenta a partir del estado de ánimo del artista…», Paulina Carretero, multidisciplinaria con orígenes en diseño de interiores.

 

Paulina Carretero

 

Paulina Carretero realizó diversos estudios en South Thames College en Londres, Reino Unido, éstos básicamente tienen que ver con diferentes técnicas artísticas: acuarela, pintura al óleo, pintura acrílica chorreada intuitiva, obra gráfica, aguafuerte, aguatinta, escultura, además de Historia del Arte e Historia del mueble.

 

Mientras redacto la entrevista, ella viaja a Texas, Estados Unidos a la clausura de su exposición “Lo esencial es invisible a los ojos” en el Hotel La Posada, y abre una nueva en Laredo Center for the Arts, en este mismo febrero… La grabación sigue su curso y continua sobre «ver con otros ojos el arte, captar cómo la esencia de cada maestro se queda en el lienzo»: “Las personas deberían detenerse ante las obras y por un momento dejar a un lado sus gustos personales y observar cuánto trabajo le imprimió el artista a la obra, observar más de cerca, fijarse en las pinceladas, sobre cómo era su pincel, tal vez estaba despeinado, tal vez ya se lo estaba acabando y posiblemente era su favorito y lo seguía usando, porque hay que darse cuenta cómo eran las líneas, si tenían el mismo grosor, observar todos esos detalles, meterse un poco en la obra del artista…”.

 

Paulina Carretero

 

Recuerda la pregunta de un curador de arte, «¿Quién no ha llorado con una pintura?», ella confiesa que lo ha vivido varias veces, “veo la luz y la sombra, me detengo y pienso sobre qué estaría sintiendo, es muy interesante saber observar y apreciar, a pesar de mis propios gustos”. La obra de la maestra Paulina Carretero está catalogada dentro del Realismo Mágico. Ama el óleo y el grabado, “si bien hay muchas tendencias y formas, me quedo con el clásico de aguafuerte sobre la placa de cobre: tengo colecciones de puro grabado que disfruto mucho”.

 

“Yo vivo entre formas y colores, líneas, texturas”

 

Paulina Carretero

 

 

Para comprender su gusto por el arte, nos lleva prácticamente a su corazón, a la casa en la que creció, que no se trató de una construcción en serie, sino del lugar que su padre soñó y diseñó para su familia y la convirtió en hogar: “yo soy la menor de nueve hermanos. Cuando nací, mi papá estaba terminando de construir una casa que él diseñó –él no terminó la preparatoria y su propuesta fue referente para muchos arquitectos y estudiantes de arquitectura-, así que contacta a un arquitecto de Guadalajara, muy renombrado por cierto, y la construyen juntos. Era una casa muy extraña, recuerdo un gran pasillo en la entrada y había jardines alrededor; el pasillo nos llevaba a la sala redonda, que en realidad era como un hexágono, y cada lado tenía una puerta, que daban a las habitaciones, y como éramos tantos de familia, mi papá le puso color a cada habitación. Así encontrabas la habitación azul, amarilla, yo estaba en la rosa y la compartía con Aurora –mi hermana mayor y quien lleva el nombre de mi mamá–, después me mudé a la verde; por la parte de los jardines se llegaba a otra sala, la sala cuadrada, que era la de juegos, donde él se sentaba a jugar dominó con sus amigos. Te explico esto para que entiendas que yo nací y crecí entre formas y colores, por eso digo «Yo no empecé a hacer Arte, el Arte me hizo a mí». No vivíamos en la opulencia pero tampoco en la pobreza, más era una casa donde no había televisión por decisión de mis padres, sí la veíamos cuando íbamos a casa de mis abuelitos o de mis tíos, pero no en casa, ese tiempo nos permitió a aprender a hojear revistas, a leer, y siento que ese fue otro ingrediente para que mi mente tuviera muchísima imaginación y creatividad. Mi papá se llamaba Pablo acaba de fallecer hace 5 meses”.

 

“Mi carrera frustrada fue arquitectura, en su lugar estudié Diseño de interiores y mi hermano que sí es arquitecto, me enseñó mucho sobre cómo se usa el escalímetro o cómo hacer los isométricos, el punto de fuga y cualquier cosa que se me atoraba, yo acudía a él. Mis primeros trazos fueron planos arquitectónicos. Cuando estaba estudiando, una de mis hermanas se fue a vivir a Holanda (ahora Países Bajos) y de regalo cuando me gradué, mi mamá me regaló un vuelo para ir a visitar a mi hermana, pero primero volé a Londres donde tuve la fortuna de conocer a unas mexicanas en la calle, que se convirtieron en amigas y con quienes viví un año, el cual me sirvió para seguir estudiado y trabajando”.

 

“Ser lo suficientemente valiente para ser malo en algo nuevo”

 

Paulina Carretero

 

Recrear esos momentos, en su voz se percibe una gran emoción. “Tengo una virtud que puede ser más un pecado, porque soy tan inquieta que decidí no quedarme en una sola carrera, y conseguí entrar a South Thames College donde tomé varios cursos, uno de ellos fue Paisajismo cuando aquí en México todavía no había, también sobre Historia del mueble, que resultó uno de mis cursos favoritos… Para mí, los muebles tienen tantas historias o tantos secretos tanto como los cuadros”.

 

La maestra Patricia Carretero tiene dos hijos —Natalia y Emilio— con muchas habilidades para el dibujo, sin embargo, decidieron tomar otros rumbos, la primera optó por estudiar Biología y el segundo Ingeniería Química. El hecho de ser ellos ahora mayores, le permite ahora estar 100% dedicada a la creación de obra así como en buscar nuevas galerías, en estos momentos la seduce el Viejo Continente para iniciar esta etapa de expansión, los primeros países podrían ser España y Países Bajos. Tiene obra permanente en el centro de Oaxaca, Oaxaca en la galería CuatroSiete; en el  Arthouse Gallery en Valle de Bravo, Estado de México y ahora, por segunda ocasión expone en Laredo, Texas, Estados Unidos, la primera fue con Fragmentos Del Castillo Interior / Octubre 2019 en la Galeria 201. Su amor por el color y los trazos va más allá, de manera permanente participa en dos subastas, una es con el Organismo de Nutrición Infantil (ONI) y la otra con el The American School Foundation. “En subastas, especialmente trato de fijarme que sean a beneficio de algo en lo que a mí me gusta, y también participo en las ferias del arte en diversas ciudades”, señaló.

 

“¿Qué inspira a la mente humana después de todo? El amor, la fraternidad, la existencia, la música, la muerte, el fracaso, la filosofía, la danza, las emociones, el placer, el poder, la frustración. El trabajo del artista en trasladar al observador a todo eso en una sola imagen.”

 

Paulina Carretero

 

Admiradora de la obra de Remedios Varo, ha sido una gran influencia para llegar al Surrealismo y al Realismo mágico. Entre sus colecciones se puede citar: Colecciones: Agave, Fragmentos del Castillo Interior, Evidencia #9, Iridiscente, Colección Bohemia; Lenguaje, Razón o puro Sentimiento, No ordinary things y Lo esencial es invisible a los ojos.

 

Paulina Carretero

 

Antes de despedirnos, platícanos qué estás pintando en estos momentos.-

Por lo inquieta que soy, estoy entre dos colecciones al mismo tiempo: “Corazón invisible” es una protesta contra el maltrato animal. No quiero que te imagines que yo estaré pintando a la res colgada en la en la carnicería ni remotamente, quiero que pienses y se trata de una de mis piezas que ya está terminada y es la que estamos promoviendo de esta colección, se trata de un elefante en primer plano de la obra, no sale completo, que viene huyendo de un circo.  Estoy tratando de dar voz a los animales, soy activista pro vida de los animales, soy vegetariana desde hace 20 años solo por la compasión a ellos… Corazón Invisible la he nombrado así, porque muchas personas piensan que los animales no tienen alma y son tratados así. La colección va a contar con 20 piezas, algunas son de gran formato 2×1.60m, las otras son de 1.70×1.60, y las más chicas son 1×1.20m. La otra colección se llama “Hace falta valor” es  el resultado de la definición de mi línea, de mi estilo. Te comparto, uno de los curadores de MUSA (Museo de las Artes en Guadalajara), Antonio García Uribe, me dijo «Creo que tu línea es más de este estilo», y sí, me siento identificada.

 

Paulina Carretero

 

La otra colección es “Hace falta valor”, y la pieza clave es una obra que ya ha sido presentada y se llama “Hace falta valor para pedir ayuda”, esta pieza la tiene el alcalde de Zapopan, Juan José Frangie (@JuanJoseFrangie) (foto que aparece en el gatefold, la segunda obra de la portada), es un hombre  que está parado frente a una ciudad, y esta ciudad es medio apocalíptica, es medio medieval y al mismo tiempo moderna, porque todos los edificios tienen foquitos rojos arriba; a un lado de la obra parece que los edificios se están cayendo en ruinas y hay detalles bien bonitos en las esquinas de la obra y el señor tiene en la mano una luz de bengala roja, toda la obra está pintada en blanco y negro, con excepción a la bengala que es roja, este bi-cromático logra impactar en la obra, es lo que estoy tratando de dar en esta nueva colección. Otros títulos que encontraremos en esta serie serán: Hace falta valor para recorrer el camino, Hace falta valor para admirar un campo de girasoles, Hace falta valor para sentarte hablar con tu pareja, así va a ser cada una de las obras. Esta colección será más pequeña, casi todas son de 90x70cm, la intención es exponer en Europa, por eso tengo que ser prudente con las dimensiones de los formatos para el traslado, concluyó.

 

Contacto

http://www.paulinacarretero.com/

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Núm. 292 – Marzo 2024