ANETTE MICHEL
En MasterChef
- ACTRIZ
- noviembre 2020
- Josué Cruz
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Reconocida como una de las mujeres más bellas de México, como actriz enamoró a millones de televidentes en melodramas como Al norte del corazón (su primer protagónico) y La mujer de Judas, más es su carrera como conductora la que le ha dado un lugar como una de las consentidas de la televisión mexicana, desde el matutino Tempranito hasta MasterChef México que Anette Michel engalana en su octava temporada.
Le comento que estamos en el MasterChef de la pandemia y responde:
“Soy una persona muy positiva y lo veo como una enorme oportunidad de poder estar en este proyecto por octava ocasión. Es la temporada ocho a pesar de la pandemia, porque en algún momento estuvo en tela de juicio si se iba a poder hacer o no. Estamos muy contentos, obviamente súper cuidados. Se está haciendo una temporada completamente atípica por la situación, siempre viajamos a visitar diferentes estados de la República Mexicana, pero en esta ocasión no es posible, lo que marca una diferencia con este 2020 y con esta pandemia, pero aquí estamos dándole todo el amor del mundo a este proyecto”.
MasterChef es uno de los programas más exitosos en una época donde las distintas opciones han menguado la audiencia de la televisión abierta, y la conductora explica el éxito:
“Yo creo que mucho tiene que ver el tipo de contenido. Es un programa en donde todo el mundo se siente identificado, que puede estar en familia, sentados alrededor de una mesa. La comida es algo básico para para vivir y la mayoría de las personas amamos la comida, nos gusta mucho saber de platillos diferentes, de lugares distintos… Hay gente que viajamos específicamente para probar algún platillo. Es uno de los grandes placeres de la vida y además es un programa sano, que puede estar lo mismo un niño de ocho años que un viejito de ochenta”.
“Todos conocemos algo de la cocina, si no cocinamos, comemos y en esta pandemia creo que le agrega un sentido mucho más puntual puesto que todo el mundo, nos guste o no, tuvimos en algún momento que meternos a una cocina puesto que era casi imposible salir, ir a buscar algo en la calle, todo estaba cerrado. Entonces creo que específicamente esta temporada tiene un brillo especial para todos los que hemos vivido este encierro y esta necesidad de producirnos nuestros propios alimentos”, añade.
Anette Michel cuenta con una espectacular figura por lo que especulo que cuida mucho su alimentación. Ella refuta mi prejuicio:
“Soy una mujer de familia muy delgada, tengo un fantástico metabolismo y la verdad es que siempre fui dramáticamente delgada, de hecho, en algún momento de mi preadolescencia tuvieron que alimentarme especialmente para para tener un poco más de músculo por mi exceso de delgadez. Para ser honesta, ya a estas alturas de mi vida, sí me tengo que cuidar más, como mujer empiezas a almacenar más grasa, pero con un poco de ejercicio, con tomar mucha agua y alimentarme de forma más o menos equilibrada, yo estoy perfectamente bien, pero aclaro que como de todo”.
Por dicha situación no sufre con la tentación de romper la dieta mientras se rodea de deliciosos aromas en el set:
“En realidad no soy una mujer de dieta, eso me ha ayudado, al no tener este estrés. Cuando tú vives con una dieta muy específica o estricta tienes muchos antojos. En mi caso he aprendido a comer de forma equilibrada, por lo que como de todo. Puedo comerme perfectamente unos taquitos y me como una ensalada y no soy postrera, eso me ayuda mucho. No soy de cocina dulce, a mí me gusta lo saladito, y lo que yo hago es que mido mis cantidades de comida, con poca comida quedó perfectamente satisfecha”.
Me resulta curioso que cada espectador tiene un cocinero favorito, aunque no ha probado los platillos de ninguno, la conductora explica:
“Es fantástico que les guste tanto un programa de cocina en donde no pueden probar, pero somos personas que a través del oído podemos entender, ‘tiene tales ingredientes y la combinación con esto’, entonces tenemos una cosa que yo he aprendido aquí en Masterchef, no vayas a creer que yo nací con este aprendizaje, tenemos una memoria gustativa, si tú has probado el chile en nogada, por ejemplo, están diciendo ‘este chile tiene estos ingredientes, este otro chile tiene una combinación’, tu memoria gustativa hace que recuerdes a qué sabía y eso hace que de inmediato te conectes con el programa, porque a pesar de que no lo pruebas, esa memoria hace las veces de la probada. Somos maravillosos los seres humanos, tenemos cosas fantásticas”.
Le pido a la conductora que se despoje de la modestia y me diga a que atribuye ser una de las pocas consentidas de la televisión mexicana, responde:
“Nunca me he sentido una persona prepotente, porque esto me dé un nivel de arrogancia o que yo tenga un poder por estar en la televisión. Para mí es un trabajo como cualquier otro. Al final del día, soy una empleada como la gran mayoría de los seres humanos que no son dueños de sus negocios. Eso creo que me aterriza y me hace ser una persona sensata, además, como soy conductora desde hace mucho tiempo, la gente te ve cómo eres realmente, la televisión es muy transparente, cuando tú solamente eres actriz siempre estás interpretando un papel, y cuando conduces, eres tú”.
Le digo que hay conductores que fuera de cámaras son muy distintos. Ríe un poco como recordando ciertos rostros y luego comenta:
“Durante mucho tiempo es casi imposible. Aunque si lo han hecho durante mucho tiempo, mis respetos, porque al final –yo siento– que sale el alma. Siempre decimos que la televisión refleja un poco de tu alma y tarde o temprano sale todo tú yo interno”.
En Wikipedia dice que empezó a modelar a los 14 años, ella aclara que ese dato no es correcto y fue a los 17 en su natal Guadalajara
Refiere: “Fíjate que todo en mi vida ha sido coincidencia y por azares del destino. En realidad yo quería estudiar ingeniería en sistemas computacionales, nada que ver con esto. Cuando yo era muy pequeña perdí a mi papá, la situación en casa era complicada y desde chicas –mi hermana y yo– tuvimos que buscar trabajo para ayudar a mi mamá. Trabajaba vendiendo ropa en una boutique. Una amiga de mi mamá, que vendía uniformes para las secretarias de los bancos, de las oficinas, de los grandes consorcios, le comentó que ella necesitaba una modelo que se pusiera los uniformes para que el comité de secretarias eligiera, ‘este saco con esta blusa, con esta tela’ y le enfatizó: ‘encaja con las vacaciones de la preparatoria de tu hija, ¿qué te parece si viene hace una prueba y vemos?’ Hice la prueba y empecé a trabajar con esta amiga en las vacaciones de la escuela -que eran casi dos meses-, yo ganaba en ese tiempo más que mi mamá en medio año. Vi la oportunidad de apoyar en mi casa, a pesar de que yo era súper tímida ¡me moría de la pena!, pero como eran puras mujeres, me sentí como un poquito apapachada y así empecé, o sea, de verdad de pura casualidad”.
Sobre sus proyectos preferidos destaca:
“MasterChef ¡lo amó! EnTempranito estuve como conductora nueve años y adoré ese programa, fue de lo más divertido, viaje por toda la República Mexicana, conocí a muchísimas personas. Como actriz, pues, tengo varias telenovelas, la primera evidentemente que hice Al norte del corazón que me dejó una huella muy, muy especial. Después, mi consentida y yo creo que será la número uno, Cuando seas mía, que es una telenovela que han repetido en innumerables ocasiones, que se ha venido a varios países y La mujer de Judas, que también me gustó mucho, me pareció muy divertido porque, en el mundo, la vendieron mucho más que otras producciones que hice, bueno, me moría de la risa porque doblan mí voz en un montón de idiomas. En esa época las niñas se vestían de La mujer de Judas, dejaron la típica calaca y estos disfraces típicos de Halloween”.
Sobre su papel soñado exclama:
“¡Muero, muero, muero por uno de época! Yo soy una mujer que cree mucho en las vidas pasadas, de hecho, interpreté un papel en La otra mitad del sol que tenía regresiones, pero fue muy cortito. Me encantaría poder participar en un proyecto, no sé si de 1800, en donde todo, todo, todo, todo fuera de esa época. Sería el sueño de mi vida”.
Sobre el futuro aclara:
“Me preocupa no cómo me vayan a recordar, lo que me preocupa, me quita de verdad el sueño todos los días, es la huella que yo estoy dejando aquí y ahora, con la gente con la que me rodeo, las cosas que hago y digo que puedan dejar huella en los míos, en la gente que está hoy aquí”.
“Les agradezco muchísimo el interés y cariño de todas las personas que, a pesar de que ya no está de moda, se ponen a ver la tele abierta para recibir MasterChef que es un programa que hacemos con tanto amor y que agradecemos enormemente que nos sigan viendo y esperemos que nos reciban los viernes a las 7 y media de la tarde por Azteca UNO”.