ZDENEK KUBANEK

La Republica Checa, también está de aniversario este mes de noviembre por lo que entrevistamos, vía remota por pandemia, a su embajador Zdenek Kubanek sobre la importancia del pasado y presente de esta nación europea.

¿Qué implicó para República Checa los cambios políticos en Europa que acontecieron en noviembre de 1989?

Con la caída del muro de Berlín en noviembre de 1989 se terminó la Guerra Fría. Nosotros recuperamos nuestra libertad por la llamada Revolución de Terciopelo que empezó el día 17 de noviembre. Ese día se iniciaron protestas masivas en contra del régimen comunista. Después tuvimos que cambiar completamente el sistema político, establecer una sociedad democrática y plural, transformar la economía socialista hacia una economía de libre mercado. Este proceso duró varios años. Hoy en día prácticamente no existen fronteras en Europa. Se puede viajar, estudiar o trabajar en otro país miembro de la Unión Europea, sin obstáculos burocráticos, lo que antes era inimaginable. Pero lo más importante es que vivimos en un país democrático.

¿Cuáles son los momentos importantes que ha pasado en su país después de estos sucesos?

En el año 93 Checoslovaquia se dividió en dos países independientes y soberanos que son la República Checa y la República Eslovaca. Estoy orgulloso de que la separación haya sucedido de una manera absolutamente pacífica. Los dos países hoy en día nos llevamos muy bien.

En 1999 entramos en el sistema colectivo de defensa, OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte). Antes, no siempre tuvimos buenas relaciones con nuestros vecinos poderosos, testimonio de ello es la ocupación alemana durante la Segunda Guerra Mundial o la ocupación por las tropas soviéticas en 1968. En aquellos momentos México simpatizó mucho con nosotros y quiero expresarle mi profundo agradecimiento por ello. Anclados a la OTAN nos sentimos mucho más seguros.

En el año 2004, la República Checa se adhirió a la Unión Europea. Pienso que la Unión Europea es un proyecto exitoso y que fue un buen paso. Para nosotros la importancia de la Unión Europea consiste, ante todo, en el libre comercio que apoyamos. El comercio con los países de esta organización representa hoy más que 80 por ciento del total.

¿Qué resultados ha arrojado su Gobierno actual?

El gobierno ha arrojado buenos resultados, ante todo macroeconómicos. Hasta hace poco, la economía crecía, cada año, entre dos y cuatro por ciento. El nivel de desempleo se mantiene bajo al igual que la inflación. Ahora el gobierno enfrenta una situación difícil por la pandemia que afecta a todas las economías en el mundo. Se supone que este año el producto interno bruto bajará entre seis y siete por ciento.

En la escena política de la República Checa hay un paralelo con las últimas elecciones en México y en mi país. La gente ya estaba cansada de los partidos tradicionales y entregó sus votos a partidos nuevos. En nuestro caso fue más bien un movimiento llamado Alianza de ciudadanos descontentos, mismo que ganó casi 30% de los votos. Esta Alianza formó el gobierno de coalición junto con el Partido social demócrata.

¿Cuáles son los principales retos de la política exterior?

Yo destacaría cuatro pilares fundamentales de nuestra política exterior: El primero es promover los intereses comerciales en el extranjero porque somos un país económicamente abierto y dependiente del comercio exterior. El segundo es fomentar buenas relaciones con los países vecinos y alentar la cooperación regional. Tercero, apoyamos una Unión Europea política y económicamente fuerte. Por último, nos esforzamos por promover el respeto de los derechos humanos y la democracia en el mundo entero.

¿Cómo son las relaciones bilaterales entre México y la República Checa desde el punto de vista político?

La relación bilateral es muy buena y tradicionalmente amistosa. Mi objetivo es profundizarla en todos los campos. Busco apoyar ante todo las relaciones comerciales. La importancia de México para nosotros se hace evidente con las recientes visitas de los altos representantes de nuestro país, como la del presidente de la Cámara de Diputados en mayo del año pasado o del Ministro de Relaciones Exteriores acompañado de una misión empresarial en octubre de 2019. En 2022 celebraremos el centésimo aniversario del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambos países

Para finalizar, ¿cómo son nuestras relaciones económicas?

México es actualmente el socio comercial más importante de la República Checa en América Latina, seguido por Brasil, y el segundo más importante en el continente Americano, sólo después de los Estados Unidos de América. Nuestro comercio con México representa más de la mitad del comercio con todos los países latinoamericanos. En 2019, el volumen del intercambio comercial entre nuestros dos países aumentó a mil setecientos millones de dólares. La balanza comercial está equilibrada.

Mi país necesita diversificar el comercio y en el mercado mexicano observamos un gran potencial. Por ejemplo, podemos ofrecer una amplia gama de productos tales como maquinaria, químicos, productos para industria energética y minera, para hospitales, pequeños aviones, tecnologías de punta y soluciones de ciberdefensa. Hay un muy importante intercambio de autopartes. Las Fuerzas Armadas Mexicanas ya están utilizando muchos productos de la manufactura checa. Por otro lado, México, por medio de las compañías Nemak, Cemex y Bimbo, fue históricamente el primer inversor latinoamericano en la economía.