ARGELIA CURIEL
Cambió la historia de las mujeres chiapanecas
en los medios
Cambió la historia de las mujeres chiapanecas
en los medios
- ACTRIZ
- febrero 2020
- Keyla Wood
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La hermosa Argelia Curiel nos comparte que hará cine, participará en la ópera prima de Rodolfo Palacios, “El Hombre del Cabaret”, junto a Betty Monroe.
Argelia es originaria de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, y comenzó su carrera como conductora del programa matutino “Salud para Todos”. Recuerda: “Todo comenzó cuando conocí a Guillermo Hidalgo, el productor del programa de Salud para Todos en el canal estatal, en ese entonces yo estudiaba psicología y cuando platiqué con él resultó que andaba buscando una conductora que tuviera conocimientos relacionados con la salud para su programa porque estaban reestructurando el formato. Al poco tiempo me integré al equipo, al frente del programa estaba un doctor, en tanto yo me encargaba de hacer los reportajes y de una sección en la cual estábamos en contacto con la gente.
Y ¿Qué te sorprendió de estar en ese programa? Muchas veces llamaron personas asustadas por ciertas condiciones y el doctor las orientaba, en la mayoría de los casos la situación no era grave. En una ocasión visitando una clínica de salud nos tocó un temblor, no fue muy fuerte pero el camarógrafo casi se nos desmaya del
Hay que destacar que tú cambiaste muchas cosas del papel de la mujer en los medios, ¿cómo te sientes al respecto? Cuando empecé en el canal eran muy escasas las mujeres en la televisora del estado, a partir de mi posicionamiento como conductora en el noticiero, muchas mujeres comenzaron a ser vistas y tomadas en cuenta para los programas.
Me maravilla la idea de poder ser una referencia para todas las mujeres… Cuando una sueña en grande las cosas empiezan a suceder, es posible ser feliz, sentirse plena y realizada como mujer y profesionalmente. Yo creo mucho en la fortaleza de mi género. Creo que todas las mujeres debemos unir esfuerzos y apoyarnos las unas a las otras siempre, y más en este medio que está controlado por hombres. ¿Desde siempre pensaste estar en la televisión? Desde niña me encantó escribir historias, escribir mucho, cuentos e incluso poesía. En algún momento quería estudiar filosofía y letras y dedicarme cien por ciento a la escritura. Sin embargo, debido a que siempre tuve una formación muy artística se me fueron abriendo otros caminos hasta que llegué a la televisión.
Tus participaciones en las series, la dinámica es distinta, ¿qué encanto le encontraste a este nuevo formato que no fuera dar noticias? Es otro lenguaje, el actuar el poder dar vida a personajes representa no solo un reto pero a la vez un entendimiento más profundo de quién soy como ser humano y qué puedo yo aportar para enriquecer al personaje desde mis vivencias. Considero que la actuación me ha sensibilizado, me ha hecho más empática con respecto a situaciones que antes no me afectaban de forma tan directa y por lo tanto me ha hecho una mejor persona.
¿Algún personaje que te encantaría dar vida?
Cada personaje que interpreto es el mejor en ese momento, no tengo ningún dream role o
alguna idea preestablecida de algún personaje en particular, simplemente me gusta fluir con lo que viene y así dejo que la vida me sorprenda.
Ya estuviste frente a cámaras, ¿qué tiene de seductor estar detrás de ellas? ¡¡¡Tiene todo de seductor!!! Me provoca Tanta emoción saber que estoy creando historias nuevas y saber que puedo con eso tocar a mucha gente para generar un cambio en la sociedad.
Esto nos lleva a “The Visitor” donde actúas, diriges y escribes. “The Visitor” es una historia de ficción en el género de terror, basada en algunas vivencias…
¿Cuál fue la detonante? Lo que en realidad detonó la historia fue un encuentro que tuve con extraterrestres cuando era niña. Una noche tuve un contacto que parecía como si fuera sueño, daba la sensación de que sucedía en otro plano. En aquella ocasión vi que varios seres luminosos verdes abrían la puerta de mi recámara y entraban a mi cuarto. Estos seres se pusieron a la orilla de mi cama y me decían cosas telepáticamente. Después de eso perdí la memoria de lo que había sucedido no recuerdo nada más. A la mañana siguiente mi jardín estaba marcado y yo amanecí con un par de gotas de sangre sobre mi almohada y un poco de sangre seca en la nariz. Había un círculo enorme, perfectamente delimitado de pasto quemado. Mi abuela no estaba cuando me levanté, solo estaba Mary -la muchacha que trabajaba con nosotros-, y le pregunté si sabía algo o si había pasado algo del por qué del círculo en el jardín y me dijo que había sido el sol que había quemado el jardín. Además, amanecí con la puerta de mi recámara abierta cosa muy extraña. Ese acontecimiento es lo que me hizo escribir The Visitor.
Muchos años lo callé, jamás volví a mencionar nada delante de nadie sobre aquel evento. De hecho es la primera vez que hablo en algún medio abiertamente sobre lo que sucedió, pero creo que es momento de hablar porque estoy segura que hay mucha gente allá afuera que podría sentirse identificada; siento que es importante comunicar que estas experiencias, y no debemos sentirnos solos o que somos los locos de la cuadra si algo así nos sucede.
Para despedirnos, sobre la ópera prima de Rodolfo Palacios, “El Hombre del Cabaret” al lado de Betty Monroe, ¿qué nos podrías compartir? Es una comedia de humor negro en donde un crimen genera una serie de situaciones que van dando vida a la historia, hay un gran elenco involucrado en el proyecto Betty Monroe, Simone Victoria, Gerardo Taracena, Martín Lopez, Miguel Estrada entre otros compañeros.
Ya estuviste frente a cámaras, ¿qué tiene de seductor estar detrás de ellas? ¡¡¡Tiene todo de seductor!!! Me provoca Tanta emoción saber que estoy creando historias nuevas y saber que puedo con eso tocar a mucha gente para generar un cambio en la sociedad.
Esto nos lleva a “The Visitor” donde actúas, diriges y escribes. “The Visitor” es una historia de ficción en el género de terror, basada en algunas vivencias…
Fotografía: Omar Guerra
¿Cuál fue la detonante? Lo que en realidad detonó la historia fue un encuentro que tuve con extraterrestres cuando era niña. Una noche tuve un contacto que parecía como si fuera sueño, daba la sensación de que sucedía en otro plano. En aquella ocasión vi que varios seres luminosos verdes abrían la puerta de mi recámara y entraban a mi cuarto. Estos seres se pusieron a la orilla de mi cama y me decían cosas telepáticamente. Después de eso perdí la memoria de lo que había sucedido no recuerdo nada más. A la mañana siguiente mi jardín estaba marcado y yo amanecí con un par de gotas de sangre sobre mi almohada y un poco de sangre seca en la nariz. Había un círculo enorme, perfectamente delimitado de pasto quemado. Mi abuela no estaba cuando me levanté, solo estaba Mary -la muchacha que trabajaba con nosotros-, y le pregunté si sabía algo o si había pasado algo del por qué del círculo en el jardín y me dijo que había sido el sol que había quemado el jardín. Además, amanecí con la puerta de mi recámara abierta cosa muy extraña. Ese acontecimiento es lo que me hizo escribir The Visitor.
Muchos años lo callé, jamás volví a mencionar nada delante de nadie sobre aquel evento. De hecho es la primera vez que hablo en algún medio abiertamente sobre lo que sucedió, pero creo que es momento de hablar porque estoy segura que hay mucha gente allá afuera que podría sentirse identificada; siento que es importante comunicar que estas experiencias, y no debemos sentirnos solos o que somos los locos de la cuadra si algo así nos sucede.
Para despedirnos, sobre la ópera prima de Rodolfo Palacios, “El Hombre del Cabaret” al lado de Betty Monroe, ¿qué nos podrías compartir? Es una comedia de humor negro en donde un crimen genera una serie de situaciones que van dando vida a la historia, hay un gran elenco involucrado en el proyecto Betty Monroe, Simone Victoria, Gerardo Taracena, Martín Lopez, Miguel Estrada entre otros compañeros.